4. Colaboración con consultores de organización y procesos
La búsqueda de consultores externos es una de las opciones recurridas, es decir, alguien con experiencia ayude a resolver un problema.
Además, siempre hay algún conocido que ha trabajado en este campo u organizado otras empresas. Se tienen reuniones con cada equipo de trabajo y se recaba toda la información, se diseñan los diagramas de flujos y se crean manuales de procedimientos. No es una mala idea, más personas que ayudan.
En esta ocasión, nos encontramos que el conocimiento para gestionar los procesos está por encima del mismo conocimiento del sector, pero en muchas ocasiones todo queda en teoría: Recomendaciones, pautas, diagramas, hojas de control manual y demás historias que quedan en el archivo ya que difícilmente se cumplen en la realidad, aunque el diagnóstico y las recomendaciones hayan sido acertadas.
¿Cuál es el motivo? No están respaldadas por un sistema, están definidas documentalmente o, en todo caso, la implementación requiere mucho esfuerzo adicional a las rutinas habituales.